jueves, 9 de julio de 2009

MALUS KAGONTÓ Y EL EJÉRCITO OJCURO

Dime con quién vas
y te diré qué tienes que hacer
(4a parte)
Meme-Oh-Toha
Capital de Reinos Recordados

Mientras la impresinonante silueta del Hombre-mosca cortaba velozmente los cielos de "La Muñeca Chochona", el último de los miembros del grupo inició un contra-ataque para obstaculizar la trayectoria mortal de aquel terrorífico movimiento dirigido hacia Prince.
Trali Tralan, sin fijarse demasiado en aquello que agarraba, alcanzó con la mano una cosa peluda y suave al tacto. La aferró con fuerza y se dispuso a lanzarla contra el endiablado enemigo. Pero algo no salió bien... A medida que su brazo giraba y giraba para coger fuerza en su lanzamiento, Tralin escuchaba un gruñido proveniente de aquello que había agarrado. A cada nueva vuelta, mas enfurecido parecía aquel gruñido. El bardo, entonces, se fijó en aquello que había agarrado sin prestar ni la mas mínima atención... era una gata en celo!!
De las patas de la felina apareció un abanico de afiladas uñas dispuestas a dejar un "cariñoso recuerdo" en la persona que había entorpecido su tranquilo sueño.

Mientras, el Hombre- Mosca, continuaba su "ataque del moscardón follonero" sin prestar atención a la situación que acontecía metros mas allá. Nada pudo evitar que Prince acabara en el suelo, con el enemigo encima suyo, con el rostro aplastado por los grandes testículos del Hombre-mosca. No solo era el dolor del golpe, sino la seria posibilidad de asfixia que podría padecer. Aquellos "güevos" eran muy, pero que muy grandes!

El combate no había acabado, al igual que el ferviente público que animaba a cada uno de los participantes al interesante duelo. La lucha sin cuartel estaba aún por decidirse!

Fue en aquel preciso instante cuando Edenwinder Pedodelechuza hizo honor a su apellido. Actuó casi instintivamente, situándose frente al Hombre-mosca, estirado en el suelo y en extraña posición de parto. Apuntando con su “ojete” al rostro del enemigo, apretó con todas sus fuerzas consiguiendo la llegada de lo que el consideraba el “Fabuloso ataque del pedo hediondo de lechuza diarreica”.

Señal que pusieron dias mas tardes en "La Muñeca Chochona".
Por si alguien se volvía a animar como Edenwinder.

Mientras, Prince se encontraba en una comprometedora situación teniendo frente a su boca aquel par de testículos sudorosos y malolientes. Pero el paladín no perdió en ningún momento la compostura y la buena educación. Esta vez, hay que decirlo, sus palabras denotaban un “ligero” enfado producto de la resolución del encuentro con aquel maleducado.

-Escuchame rata inmunda, o cualquier insecto que seas.- Prince había faltado a algunas clases de biología-Voy a tener un invitado a la fiesta de té y ese serás tú, entendido?!

La escena podía llegar a ser cómica si no fuera por la tensión que la lucha había creado en la taberna. Por un lado teníamos un aprendiz de mago que aparecía y desaparecía tras la barra del bar, lanzando sin parar una y otra vez jarras de cerveza. Parecía mas bien uno de aquellos conejos de feria a la que los niños debían derribar con las bolas de cuero: ahora estoy, ahora no estoy, ahora estoy, ahora no estoy...
Por otro lado, un elfo tirado en el suelo en posición bastante desagradable: con las patas hacia arriba, cogiéndose cada nalga con cada una de sus manos, buscando y consiguiendo abrir al máximo su... su... ehem... su "ojete", con la cara enrojecida por el esfuerzo, buscando lanzar un ataque mortífero hacia el Hombre-mosca. Lo único que se pudo escuchar fue un PPPSSSSSFFFF... que dejó a todo el personal pasmado.
Después teníamos un bardo enzarzado en una extraña coreografía animal con una gata con muy malas pulgas. La gente que observaba como aquel personaje iba de aquí para allí, moviendo los brazos como un loco, gritando palabras ininteligibles y con una gata aruñándole los morros, no llegaba a entender como se había llegado a aquella situación.
Por último, el pobre paladín no estaba en mejor situación que la de sus compañeros. Estirado en el suelo, con la única visión de un par de enormes "pelotas" en todo su rostro y el Hombre-mosca disfrutando de aquella posición del todo indecorosa para su contrincante.

Pero Prince, tuvo la suficiente destreza como para liberar sus brazos y conseguir agarrar el cuello y los testículos de enemigo. Utilizando su inacabable discurso educado, esta vez un poco mas imperativo, propuso de nuevo invitar al té a su interlocutor. Esta vez, sus palabras fueron acompañadas por un ligero, pero efectivo, apretón en los cataplines del Hombre-mosca. Aquello parecía que funcionaba, ya que el homo-insecto dijo:


-Sísísísísí... valevalevale... un té... sísísí... pe-pe-pe-pero no no no apretes que-que-que quiero mucho a-a-a-a mis pelotillas!!

En estas que una figura de porcelana con la imagen de una pastorcilla acompañada de una ovejita y un perro labrador, cortó el aire de la taberna, estrellándose en todos los morros del "preocupado" Hombre-mosca. De inmediato, quedó con la cara medio desfigurada, con trozos de porcelana enganchados en todo el rostro y completamente inconsciente.
La gente explotó en "vivas" y "bravos", lanzando monedas a los protagonistas de aquel fortuito entretenimiento. Hasta alguna vieja se atrevió a lanzar su holgada ropa interior, muestra del agradecimiento al liberar a los clientes de "La Muñeca Chochona" de aquel desagradable personaje. Pero algo no había acabado aún. Tralin Tralan, aún corría por el local con una gata en celo en el rostro. Al estar el animal obstaculizando la visión del bardo, este se dirigía a toda velocidad contra una pared en la que seguro se estrellaría y haría mucha "pupita" al la pareja zoofílica.
Después del topetazo, Rumik Aquínosefía reunió de nuevo a Prince, Edenwinder, Tralin y Smith, agradeciendo sinceramente lo que habían hecho por su local. Les hizo memoria de lo que debían hacer para iniciar la secreta misión que Armando Jaleo Of Balls les había asignado: visitar a Fisher Prais en la calle de gremios para poder equiparse en condiciones.

Ahora si que comenzaba la aventura de aquellos intrépidos guerreros.

No hay comentarios:

Publicar un comentario