LA ESCUELA DEL BAR

Si bien mi buen amigo Jorge, explicaba en su blog alguna de las grandes frases lapidarias originadas en el bar que queda bajo su piso, me veo en la obligación de exponer lo que escuché, ayer mismo, en una cena improvisada en un bareto de no muy buen servicio.

Por partes:

Habíamos quedado un grupo de amigos para dar unos toques de pelota, ya que la semana que viene se celebrará un fin de semana de competición de voley playa y un grupo de padres nos hemos aventurado a participar. Nuestra misión es clara: demostrar(nos) que aún podemos...lo veo crudo!

Pues bien, entre tanto toque playero, nos entró el hambre y decidimos ir a cenar a un bar que queda justo al lado del parque donde entrenábamos (es un decir...).

La cosa, ya de inicio, tiene guasa, porque el bar es de tapas, lleva el nombre de Mari Paz...pero lo regenta una familia de chinos. No es por nada, pero los términos TAPAS+MARI PAZ+CHINO...no me cuela mucho, que digamos.

Que tardaron más de una hora en servirnos 8 bocadillos, no es lo importante. 

 Lomoqueso...un misterio!

Es más, deberíamos agradecer a los orientales el regalo que nos hicieron, porqué en aquella espera, pudimos escuchar la sabiduría de los jóvenes de hoy en día destilan por todos los poros de la piel. Bueno, estamos hablando de gente de entre 25 y 30 años encima...

Os pongo en antecedentes...debía ser una cena de cumpleaños y se reunían chicos y chicas. En la mesa, distribuidos en la mesa por sexos (chicos a un lado, chicas al otro), pero griterío de una punta la otra. La conversación iba sobre perder peso y quemar grasa. Gracioso cuando se estaban metiendo unos platos combinados a base de “fritanga” pura y dura.

Ahí las frases lapidarias, aparecidas en momentos diferentes de la larga espera de los bocadillos:

-Pues yo, ya puedo comé y comé, que mi organim-mo lo erpulsa naturamente...así sin hacé ná de ná.

-Pos a mí, eso de caminá no mace perdé peso... me pongo 20 minutos y no pierdo ni un kilo.

-Eso der padel está mu bieng. Te viene la pelota, que e así como la de tenni, y tu vas y le das PAM! E mú tén-nico... pero una vé lo pilla PIM-PAM.

-Yo en el gin-nasio, me pego 5 repeticione.

-De qué?

-De qué coñio va a ser... de bices!

-Y de lo otro?

-Ná...una cuanta y yastá.

Y otras más que intenté olvidar durante la noche. La mejor fue la del que cumplía el aniversario que, dirigiéndose al camarero chino, le dijo:

-Tó mu gueno! No vé...si tu nos trata bieng, yo te traigo gente. Tienes que curratelo pá que estemo contento, si no no venimo!

 -Glasia siñol!